¿ Por donde empezamos?..

A la hora de hacer una Asesoría de Imagen Integral, debemos recopilar una serie de datos relacionados con el cliente, tales como:

• su trabajo

• su entorno

• sus hobbies

• su edad

• su estilo personal

• etc...

Y para ello, tendremos a disposición el mayor de nuestros tesoros, nuestro...

"Protocolo de Actuación".

A través de este protocolo, seguiremos una serie de pautas que anteriormente hemos determinado como válidas a la hora de ejercer nuestras funciones. Será el paso a paso de nuestro trabajo, y nunca deberemos salirnos del guión ( en la medida de lo posible).

Este documento, estará compuesto por tres partes, según la organización de cada persona. Yo, por ejemplo, lo divido en tres partes porque lo veo más organizado:

1ª parte: está compuesta por fichas comunes, en las cuales, aparecen los datos físicos del cliente (morfología corporal, tipos de piel, tipos de cabellos, etc), evidentemente, los fichas son generales hasta que se rellenan,en lo que pasan a ser personalizadas en el momento.

2ª parte: datos recopilados en la entrevista con el cliente. En esta parte, recogeremos los datos que nos proporcione el cliente: sus hábitos de vida, sus costumbres, edad, profesión, sus hábitos de higiene, etc...

3ª parte: las fichas de protección de datos del cliente, derivación a otros profesionales, el consentimiento informado, cesión de derechos de imagen, etc...

Toda esta información, la recopilaremos en un dossier, que mantendremos siempre a mano hasta que terminemos el trabajo con nuestro cliente. Es conveniente guardarlo en formato digital, para poder acceder a él en el supuesto que dicho cliente vuelva a solicitar nuestros servicios pasado algún tiempo. Evidentemente, nos desharemos los dossieres físicos después de un tiempo prudente.

¿Cómo nos organizamos?

Lo primero es entrevistarnos con el cliente.

Tener una primera toma de contacto, en la que él o ella, nos haga saber cuales son sus necesidades, que pretende conseguir con nuestros servicios, si el cambio ese para un evento en particular, o si por el contrario es un cambio más estable o permanente, etc...

Nosotros como Asesores, debemos de fijarnos en cada detalle: su estilo, si viene con el pelo arreglado o no, si viene maquillad@ o no, su postura corporal, la expresión de su rostro, la manera en que se expresa, el vocabulario que utiliza...

Estos son datos que obtendremos a simple vista, datos que son igual de válidos o más, que los que nos cuente el propio cliente. La observación es imprescindible, la primera impresión que nos aporte nuestro cliente, nos revelará varias características sobre su personalidad.

Una vez que hayamos terminado la entrevista, nuestro trabajo consistirá en ordenar la información que ya tenemos en nuestro poder, definiremos que características tiene el cliente, elaboraremos nuestro diagnóstico y nos pondremos manos a la obra para conseguir los objetivos que nos ha indicado.

En primer lugar, definiremos cuales son las áreas en las que lo podemos ayudar nosotros mismos, a continuación, tiraremos de nuestro dossier de profesionales colaboradores para enviarle el expediente de nuestro cliente (siempre bajo el consentimiento del mismo) y hacerles saber las necesidades del usuario.

A partir de ahí, comienza el cambio...

Lo dejamos por aquí, en las próximas entradas hablaremos de cada una de las diferentes asesorías que existen.

No olvidarme chic@s!! que esto se va a poner muy interesante!!!

Nos vemos pronto!!